Creo que en 2015, en los mercados hispanos, las empresas que quieran ganar repercusión online tendrán que entender mucho mejor la necesidad de la creación de contenidos de calidad. La inversión en equipos especializados en la selección, creación y edición de contenidos online para acercarse a los usuarios y ganar repercusión y tráfico irá en aumento.
En quienes ya tienen blog, se sigue viendo el debate constante entre la calidad y la cantidad de los contenidos. Teóricamente todos tienen en mente la calidad porque quieren aportar a los demás y ganar una reputación sólida como profesionales, si bien son conscientes de que esa es una apuesta a un plazo más largo. No obstante, todavía muchos se dejan llevar por la cantidad, pensando que lo que necesitan es impacto en la comunidad para rentabilizar su inversión con publicidad.
La mayoría de la gente está más centrada en tácticas que les lleven a acumular más seguidores que en tratar de entender cuáles son sus verdaderas necesidades y cómo se están adaptando los Social Media en nuestros mercados.
Este debate lleva 2 aspectos:
Que se atraiga a comunidades efímeras o de mucho menor nivel (no comprometidas con la marca).
Que muchos de los contenidos que creen sean de interés puntual y, en consecuencia, el esfuerzo de creación sea mucho mayor a largo plazo.
Una de las palabras de las que más se hablará en 2015 será conversión. Creo que será la temática en la que se centrarán aquellos blogs que llevan más tiempo en la red, ya que muchos se dan cuenta de que, tras conseguir a muchos seguidores, hay que centrarse en técnicas de venta.
Será creciente el interés por los datos que dejan los usuarios para poder interpretarlos y ajustarse a sus necesidades. No obstante, eso va a ser un reto porque, bajo mi punto de vista, no todo el mundo está preparado para practicar la lectura de los datos, incluida su interpretación tras la extracción.
En cuanto a modelos de negocio con contenidos propios (marca persona), existe la tendencia -importada de Estados Unidos- de contar la historia personal para empatizar con la audiencia, especialmente si uno ha tenido un problema -una situación económica comprometida- y ha salido de ella gracias a las oportunidades que ofrece la red, que además han supuesto un crecimiento personal. Aunque esta forma de contar historias es una manera de conseguir engagement con la comunidad -pues está demostrado que los contenidos negativos consiguen tanto o más impacto que los positivos-, está a punto de convertirse más en un tópico que en otra cosa. Esto es lo que, desde mi punto de vista, se entiende de forma errónea como “comunicación emocional”. Probablemente este modelo vaya en aumento en 2015, pues apenas se está descubriendo en los mercados hispanos, pero será una tendencia que, a la larga, se agote por necesidad.
Referencia: Benet M. Marcos es cofundador y editor jefe de Socialancer, una publicación de referencia en marketing online para los mercados hispanos.